Día de la Preservación de la Capa de Ozono: por qué es clave para la vida en la Tierra

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Cada 16 de septiembre el mundo recuerda la importancia de proteger la capa de ozono, un escudo vital contra la radiación ultravioleta

Hace cuarenta años, las naciones se reunieron en el marco del Convenio de Viena para la Protección de la Capa de Ozono y acordaron adoptar las medidas adecuadas para proteger a las personas y al planeta de la radiación ultravioleta nociva que atraviesa una capa de ozono que podría estar dañada.

Sobre la base adicional de información científica, se adoptó el Protocolo de Montreal y se comenzó a eliminar gradualmente los clorofluorocarbonos —sustancias químicas artificiales utilizadas en la refrigeración, los aerosoles y la producción de espuma—, con lo que se puso en marcha la recuperación de la capa de ozono.  

En la Facultad de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales de la UNC, donde se investigan problemáticas ambientales y se forman profesionales comprometidos con la sustentabilidad, recordamos la importancia de este día para la vida en la tierra

Esta conmemoración ha jugado un rol clave en la lucha contra el agotamiento de la capa de ozono, protegiendo así la vida en la Tierra. La fecha fue elegida en honor a la firma del Protocolo de Montreal en 1987. Este protocolo es uno de los tratados medioambientales más exitosos, logrando la cooperación global y la implementación de medidas efectivas para reducir el uso de sustancias nocivas. La primera celebración oficial tuvo lugar en 1995 y, desde entonces, cada año se destaca con lemas que subrayan la importancia de preservar la capa de ozono y su relación con la mitigación del cambio climático.

¿Qué es la capa de ozono y por qué es vital?

La capa de ozono, una franja de gas ozono (O3) en la estratosfera, entre 10 y 40 kilómetros sobre la superficie terrestre, actúa como un escudo protector al absorber la mayor parte de la radiación ultravioleta (UV) del sol, especialmente la UVB, conocida por causar cáncer de piel y cataratas, además de afectar ecosistemas y vida marina. Sin esta capa protectora, la vida en la Tierra estaría en grave peligro.

Es importante distinguir entre el ozono estratosférico, beneficioso, y el ozono troposférico, presente a nivel del suelo como resultado de la contaminación, que puede provocar problemas respiratorios y otros daños a la salud.

El agujero de ozono y la urgencia de actuar

El descubrimiento de un "agujero" en la capa de ozono, especialmente sobre la Antártida, por científicos en 1985, subrayó la urgencia de actuar. Gracias a la implementación del Protocolo de Montreal, se ha logrado un avance significativo en la recuperación de la capa de ozono, contribuyendo además a la lucha contra el cambio climático.

Este año, en el Día Internacional de la Preservación de la Capa de Ozono, celebramos este logro histórico y miramos hacia adelante con ilusión a otros cuarenta años de acción. El Protocolo de Montreal y el Convenio de Viena siguen siendo cruciales para supervisar los niveles de ozono y radiación ultravioleta, así como las sustancias que agotan la capa de ozono y otras sustancias químicas, como los hidrofluorocarbonos (gases de efecto invernadero), que se están eliminando gradualmente en virtud de la Enmienda de Kigali.  

En nuestra Facultad, la formación en ciencias exactas, físicas y naturales se vincula directamente con estos desafíos ambientales. A través de la investigación, la docencia y la extensión, contribuimos a la construcción de un futuro sostenible y al cuidado del planeta.