El Día Nacional de la Energía Atómica se celebra cada año el 31 de mayo en Argentina. Es un día para reconocer y celebrar los logros del país en el campo de la energía nuclear y sus contribuciones a la investigación científica, la salud, la industria y el desarrollo.
Argentina tiene una larga historia en el campo de la energía nuclear y cuenta con uno de los programas nucleares más avanzados del mundo. El primer reactor nuclear del país, RA-1, se construyó en 1958 y desde entonces, Argentina ha desarrollado una amplia gama de tecnologías nucleares, incluyendo reactores, instalaciones de ciclo de combustible nuclear y aplicaciones médicas.
Uno de los avances recientes en el programa nuclear de Argentina es la reforma del reactor RA-0, que pertenece a la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA), y que se encuentra operando en nuestra Facultad desde hace casi cincuenta años. El reactor RA-0, de “potencia cero”, es un reactor de investigación que ha estado en operación desde la década de 1960 y se utiliza para una amplia gama de investigaciones científicas y tecnológicas, incluyendo el desarrollo de instrumentación y nuevas tecnologías. Es una herramienta fundamental para la capacitación de estudiantes universitarios y para formar al personal de las centrales nucleares y otras instalaciones del área.
La reforma del reactor RA-0 es un paso significativo en el programa nuclear de Argentina, ya que mejorará aún más la seguridad, la confiabilidad y la eficiencia del reactor, y también la calidad de la investigación científica y los desarrollos tecnológicos realizados en nuestra institución. El proyecto de reforma implica reconstrucción del blindaje hormigón, la sustitución de equipos obsoletos, la actualización del sistema de instrumentación y control del reactor y la instalación de dispositivos e instrumentos experimentales modernos. Se estima su inauguración a finales de este año.
La modernización del reactor fue gracias al esfuerzo mancomunado de la CNEA y de la UNC, a través de la FCEFyN. Ambas instituciones aportaron conocimientos científicos y tecnológicos con profesionales expertos y financiación para ejecutar las obras.
El Ministerio de Ciencia y Tecnología de la Provincia de Córdoba con su aporte económico y divulgación científica de las actividades del reactor RA-0.
El Departamento de Física de la Facultad, al compartir espacios necesarios para la ejecución del proyecto.
El Departamento de Estructuras de la FCEFyN con sus aportes en verificación del diseño y análisis estructural.
El Laboratorio de Baja Tensión de la FCEFyN con sus aportes en el diseño del Proyecto de Instalación Eléctrica.
La Secretaría Técnica de la FCEFyN con la gestión y seguimiento de todas las obras edilicias.
Al grupo de trabajo de la Gerencia de Ingeniería de Reactores y Centrales Nucleares (GIRCEN) y del Departamento de Reactores Experimentales y Servicios (DREyS) de la CNEA, por su invalorable aporte en instrumental nuclear pero fundamentalmente en recursos humanos de excelencia, imprescindibles para llevar a buen término este proceso.