A los y las Estudiantes de la FCEFyN en su día
Ser estudiante implica sumergirse en un viaje en el que a veces, la percepción del tiempo se vuelve difusa. Sin embargo, quiero proponerles que se tomen un minuto de su tiempo para apreciar el privilegio que constituye transitar ese camino. Hoy, con alguna distancia, puedo resumirlo como una etapa de felicidad plena.
En primer lugar siéntanse parte de la aventura infinita de conocer, tienen la posibilidad de entrar en contacto con múltiples conocimientos que modificarán su visión del mundo. Llegará un momento en que ya no verán de la misma forma su entorno. Es un trayecto también de autodescubrimiento, de toma de conciencia sobre quiénes desean ser como profesionales y el propósito en este tiempo que les toca. Toca forjar el carácter, asumir las responsabilidades, hacerse valer ante las injusticias.
Aprovechen para conectar con otras personas, conocer gente de múltiples procedencias. Cada una tendrá su historia de vida y enriquecerá la nuestra. Pero además, sin darnos cuenta, puede transformarse en un confidente durante largas horas de estudio, ayudándonos a entender la realidad desde otro lugar. Encuéntrense y disfruten de las salidas y los mates, porque hoy ya podemos encontrarnos con esas personas que conocimos por whatsapp y por clases virtuales.
Esta es la etapa de la vida de las grandes pasiones, de los momentos intensos, de los besos entre apuntes, de sueños dibujados sin filtro, de anécdotas que quedan impresas en esos resúmenes que se manchan con café. Les deseo que ese espíritu les pertenezca siempre, seguir deseosos de alcanzar lo imposible y hacer lo que haya que hacer para conseguirlo.