El trabajo publicado por la revista editada por la Asociación Estadounidense para el Avance de las Ciencias le valió hoy a Jaureguiberry para ser reconocido como Campeón Internacional del Premio Frontiers Planet en Suiza.
Un jurado de expertos lo eligió por ser líder del descubrimiento de los factores que impulsan la pérdida de la biodiversidad. El investigador, que trabaja en el Instituto Multidisciplinario de Biología Vegetal, que depende de la Universidad Nacional de Córdoba y el CONICET, recibirá más de un millón de dólares de premio que deberá usarlos en investigaciones.
Jaureguiberry, se graduó como biólogo en nuestra facultad y forma parte del equipo de investigación de la ecóloga Sandra Díaz. Esta investigadora también fue coautora del estudio de 2022 y es la única latinoamericana que ocupa un puesto en el consejo de asesores científicos de Naciones Unidas.
A medida que avanzaba en el cursado de la carrera de Biología comenzó a interesarse por la temática en el área de ecología. Luego de recibirse de Biólogo, se incorporó al IMBIV como becario doctoral a fines de 2006 en un grupo de trabajo enfocado en estudios en Ecosistemas, Diversidad y Sustentabilidad. Desde entonces ha estado involucrado en muchos proyectos de investigación relacionados con la biodiversidad y el funcionamiento de los ecosistemas.
Si bien su línea principal de investigación es en ecología del fuego, es decir, el rol del fuego en los ecosistemas, a través de su participación en grandes proyectos interdisciplinarios se involucró en trabajos enfocados en las relaciones entre biodiversidad, las actividades humanas y la sostenibilidad de los ecosistemas. Este tipo de estudios aportan información muy necesaria sobre el impacto de las actividades humanas sobre distintos aspectos de la biodiversidad y de los ecosistemas en general.
Uno de los aspectos más desafiantes de hacer investigación es que para poder avanzar las “fronteras del conocimiento”, siempre hay cosas nuevas que aprender y entender. Participar en proyectos con otros grupos de trabajo, tanto a nivel nacional como internacional, le ha permitido interactuar con investigadores y expertos con diversas formaciones, lo que ha sido muy enriquecedor tanto a nivel profesional como personal. Al mismo tiempo, esto plantea desafíos importantes, porque requiere aprender muchos contenidos en un tiempo corto, y adaptarse a dinámicas de trabajo que pueden ser diferentes de las habituales. La forma de superar estos desafíos es apoyándose en la experiencia de otros colegas, teniendo una actitud receptiva, y poniendo mucho esfuerzo y dedicación.
Los resultados de su estudio fueron una contribución importante para dar forma al documento de políticas elaborado en la COP15 de la Convención de Diversidad Biológica (CDB) de Kunming- Montreal, que incluye una referencia específica a la clasificación de los impulsores directos, así como objetivos globales específicos para mitigar cada uno de ellos. Los países miembros de la CDB, entre los que está Argentina, se han comprometido a cumplir con estos objetivos como parte de la agenda global de sostenibilidad 2030-2050.
El enfoque metodológico puede ser utilizado en cualquier contexto espacial, temporal o temático para comprender el impacto de los impulsores directos, según lo requieran los diferentes interesados, y, por lo tanto, proporcionar una base científica esencial para acciones de mitigación más efectivas y concretas.
Después de haber recibido este premio, Jaureguiberry tiene varios proyectos en mente para los próximos años. Algunos se relacionan con profundizar el conocimiento sobre las causas de pérdida de biodiversidad, para poder analizar estas causas a escalas más específicas, que faciliten su consideración y abordaje por parte de los formadores de políticas, haciendo más probable la implementación de acciones concretas para su mitigación.
Por otro lado, su interés a partir de este tipo de estudios es profundizar el conocimiento sobre las alternativas de uso sostenible de los recursos naturales. Estas alternativas se centran en prácticas que permiten al ser humano satisfacer sus necesidades actuales, y al mismo tiempo mantener la integridad y funcionalidad de los ecosistemas, de manera que estos puedan proveer de esos mismos recursos naturales a las generaciones futuras.
¡Felicitaciones, Pedro Jaureguiberry!