El pasado 20 de Octubre la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT) aprobó la producción de un innovador respirador argentino. El nuevo desarrollo nacional, un respirador mecánico para pacientes con Covid-19, tuvo entre sus impulsores a Lautaro Turco, Ingeniero Biomédico de la FCEFyN.
El proyecto, denominado Ciclador Automático de Resucitador (CAR), fue desarrollado en la empresa Grupo INIBIO S.A., junto a un equipo de investigadores de la (UNRaf) y el Centro Tecnológico Rafaela (CenTec), Centro que coordina Turco. El mismo fue desplegado en el marco de la Unidad Coronavirus conformada por el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación, la Agencia I+D+i y el CONICET.
El inicio del proyecto se remonta a las pasantías que realizó Lautaro en Rafaela, Santa Fe, durante sus años de estudiante de Ingeniería Biomédica. En ese entonces trabajó en la empresa Grupo INBIO S.A., dedicada a servicios de mantenimiento y desarrollo, que luego sería parte del equipo de fabricación del ciclador.
Quede en una muy buena relación con la empresa –Grupo INBIO- y realizamos otros trabajos juntos. Cuando empezó la pandemia me ofrecí a colaborar y se inició el proyecto del ciclador. Ayude en el diseño desde un principio en conjunto con el CenTec.
El CAR brinda asistencia respiratoria a pacientes a través de un resucitador manual (AMBU) automatizando el proceso de ventilación. A su vez se destaca por su fácil manejo, y gracias a su sencillez, se puede fabricar con insumos de industria nacional a gran escala y bajo costo. Este instrumento nace en respuesta a la demanda de respiradores y personal médico que generó el Covid- 19. Además evita el uso de aire comprimido y oxígeno, recursos que hoy en día son escasos. De esta forma permite reforzar la respuesta sanitaria frente a la pandemia, evita el colapso de trabajadores de la salud y pone en valor la cadena productiva local promoviendo la sustitución de importaciones.
Lo innovador de esto, en todas partes de mundo se estuvieron haciendo este tipo de cicladores, pero muchos se quedaron en el medio porque les faltaba la parte biomédica. Faltaba la parte de certificaciones y ensayos que fue un gran trabajo que estuvimos haciendo.
Luego de la aprobación de la ANMAT el ciclador podrá fabricarse en Santa fe y comercializarse y distribuirse en toda la Argentina. Destacamos el aporte realizado por los ingenieros biomédicos, especialmente a Lautaro Turco graduado de la FCEFyN que se puso a disposición para colaborar con el sistema de salud. Es un orgullo para la Facultad conocer el impacto de nuestros graduados en la sociedad, especialmente durante esta pandemia.