Desde 1889, cada 1° de mayo se conmemora el Día Internacional del Trabajador. Este año quisiéramos reflexionar sobre el contexto de pandemia en el que nos encontramos, el cuál nos fuerza a repensar y reinventar las formas de trabajar. Como así también a descubrir y crear nuevos modos y espacios de educar.
Sin duda una realidad que nos desafía como Facultad, pero que nos muestra una vez más el compromiso y sentido de pertenencia de cada miembro de nuestra comunidad. A quienes les expresamos nuestro reconocimiento, gratitud y deseo de que este sea una oportunidad para crecer como institución.
Agradecemos al cuerpo docente, el esmero y dedicación puesto en trasladar rápidamente gran parte del dictado de sus clases a plataformas virtuales. Nuevos espacios de enseñanza que faciliten y potencien el contacto con sus alumnos, de grado y de posgrado, en este cuatrimestre diferente.
Agradecemos al plantel nodocente, ya que la tarea educativa y el sostenimiento de nuestra Casa, es apoyada administrativamente por su esfuerzo y su capacidad desde sus domicilios.
Agradecemos a nuestros estudiantes, por su paciencia, su apoyo en este proceso de reestructuración y el esfuerzo realizado en la migración a modalidades de educación virtual.
Y también saludamos en su día a quienes han estudiado en nuestra Casa y hoy ejercen su profesión con esmero y responsabilidad. Se incorporaron al mundo del trabajo con conocimientos idóneos, ética y compromiso social.