"Tribulación"
.
Autor: Marcelo Lo Mónaco
Su mirada se volvió pálida, estática, de piedra.
En sus ojos no existe destello alguno,
sólo el vacío eterno de la muerte.
Inmóvil turbulencia del alma que partió
y en el infierno se retuerce en encarnada lucha.
Sabe que no lo merece.
Porque vivió con pasión, lo ofreció todo.
Amo profundamente, recorrió caminos, leyó libros.
Se deslumbró con las hojas en otoño,
y el frío le corrompió los huesos.
Calmó su sed, compartió risas,
lloró las angustias del desamor.
Sintió la oscuridad de su pecho,
y conoció la opresión del poderoso,
y el ruego del débil.
Convenció al demonio de merecer el cielo
Y le fue otorgada la nada.
Y hoy, detrás de esa mirada pálida y estática,
la rabia contenida acompaña su eterna consciencia.
